Borges aventura, no sé dónde, una inquietante hipótesis: ¿y si en las pesadillas estuviéramos "de hecho" en el infierno, colados por una rendija, y no fuera una ilusión tan solo?. A la luz de la teología escatológica, no es nada heterodoxo. Si el infierno es un estado de la mente (de cuasi-aniquilación), una pesadilla sería como un anticipo, o un aviso, o simplemente una muestra del Infierno que cada uno llevamos dentro. Gracias a Dios, despertamos. Y esto también es un símbolo, esperanzador.
7 comentarios:
Por los pelos... Me gustó tanto esta entrada cuando la leí en mi blogg que había pensado subirla al texto principal, como adenda tuya. Pero aquí está estupenda, con una conseguidísima ilustración.
¡Y que soñemos con los angelitos!
Amigo Jesús, ésta es una de las cosas que me hacen pensar que somos muy poco, algo más que simios, ah, eso sí.
A pesar de haber sido "entrenados" para la Muerte (Cada noche morimos un poco -y caemos en el Paraíso, en el Infierno o en ese punto medio en el que no somos nadie...¿El Purgatorio?), la dejamos arrinconada en el cuarto oscuro de "lo impensable".
Y cada vez que se nos aparece, repentina y trágica, es como si la descubriéramos por vez primera, volvemos a ser chiquillos asustados. Y, pobres infelices, nos obstinamos en pensar que el día es laaargo, muy laaargo, y en que aún tendremos tiempo para jugar a muchas cosas antes de que nos manden a la cama.
A pesar de haber soñado muchas veces, de haber visto el Sueño de otros, y de habernos despertado de tantas horribles pesadillas.
Y eso que a sus colegas paganos (Cicerón y compañía) los retrata en animado coloquio infernal. Es como decir que el infierno será diferente para cada cual, y que habrá quien no se merezca el Cielo pero tampoco el Horror absoluto. Una tibia, inquietante hipótesis, para mí.
Sospecho que Cierto Poeta, al que le tienen por Muerto, algo habrá visto de lo que viene luego. En más de una ocasión me ha hecho volver sobre mis pasos con otra de sus hipótesis:
"El Infierno sería separarnos
y saber para siempre
que la culpa fue nuestra"
Desconocía esta frase de Borges, que parece la contracara de Coleridge y su rosa del paradisíaco mundo onírico. Te la abradezco y felicito por este espacio inteligante al que me trajo la casualidad y que recorré con frecuencia.
Saludos...
Desconocía esta frase de Borges, que parece la contracara de Coleridge y su rosa del paradisíaco mundo onírico. Te la agradezco y felicito por este espacio inteligante al que me trajo la casualidad y que recorré con frecuencia.
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